No sabía lo difícil que sería despedirce
hasta que tuve que decir "adiós"
No imaginaba lo triste que podía ser
hasta que lloré
Ignoraba aquel sentimiento
hasta que te abracé
y más aún, ignoraba tus sentimientos
hasta que lloraste conmigo
Sucumbía ante el lamento
hasta que conocí la alegría
Sucumbí tantas veces
hasta caer en la monotonía
Extrañaba incluso algún desprecio
hasta que no fue necesario
y entonces la ironía era el perfecto argumento
hasta este preciso momento
Abrí los ojos entre tanta oscuridad
conocí la verdad
encontré lo que buscaba..
es tu corazón a quien yo amaba
Preferiría entonces no volverme a despedir
pero me temo que nos tocará de nuevo
seremos fuertes! tu lo has dicho
siendo nuestro amor una razón para vivir
No nos gustan las despedidas yo lo sé, somos malos para eso.. Pero sueño con que esta etapa que comienza para nosotros será la mejor!
No hay comentarios:
Publicar un comentario